-¿Que le pasa a esta llave? -dijo el encargado del almacén a Joaquín. -Nada, que se ha pasao de rosca. -El que está pasao de rosca eres tú. Ya podías tener más cuidao con las herramientas. -No es para tanto -dijo Enrique al tiempo que entregaba las suyas. -Esa llave estaba muy vieja. -Ni vieja ni nada; es que Joaquín es un manazasArmando López Salinas. Año tras año. Página 102. Editorial: Editorial Alcayuela.