Es la fluidez con que salen las palabras de nuestra boca de forma espontánea, lo que denomina en ocasiones como tener labiaCANO MUÑOZ ISIDRO. El don de la palabra. Hablar para convencer. Página 189. Editorial: Ediciones Paraninfo, S.A. 01 ene 2006. ISBN: 9788497324236.
↑Desde 1999 se recomienda considerar siempre diptongo, a efectos de acentuación gráfica, la combinación entre vocales cerradas “átonas” (/iu/, /ui/), o entre vocales cerradas con vocales abiertas ambas “átonas” (/ua/, /ei/, /io/, etc.). Esta recomendación se transforma en prescripción a partir de la reforma ortográfica de 2010, por lo que muchas palabras que se podían escribir con hiato deberán escribirse en diptongo. No obstante, esto no implica una proscripción en la pronunciación. Más información.