Es su propia conducta la que hace a una persona respetable, y no su nacimiento.
Ejemplo:
Aquel dicho tan sabido: / «No es Señor quien señor nace / «sino el que lo sabe ser.» / Es un dicho repetido / Por nuestros sesudos huasos, / En buen sentido no escasos, / I ojala escrito estuviera / En la vacía mollera / De orgullosos pisaverdes,Daniel Barros Grez. Fábulas orijinales. Página 166. Editorial: Imprenta Victoria. Santiago, 1888. Formato: pdf.