Las tirillentas camisas de sacos harineros se desasían de las pretinas mugrientas de los pantalones. (posible referencia sin formato: (La sangre y la esperanza. Escrito por Guzmán, Nicomedes, 1914-1964. Editado en Santiago por Orbe. Año 1943. Página 31 [1])).
Guateludo y tirillento,/ como un tony de saínete,/ o una gran mar de tormento,/ azotado por el viento/ de la canción popular,/ va de pajar en pajar,/ andrajosos de aventura,/ buscando la sepultura/ donde echarse a descansar.Pablo de Rokha. Antología. Editorial: Lom Ediciones. 2000. ISBN: 9789562822978.