Antiguamente un calorro era una piel de oveja con su lana que se usaba a modo de manta en la cama o por los hombros de los hombres que trabajaban a la intemperie en los días duros de invierno (pastores, carboneros, leñadores). Hoy en día un calorro es cualquier prenda de abrigo de invierno. Chaqueta, chaquetón, abrigo, chambergo, etc., etc.