Del francés anomie, y esta acuñada por el filósofo Jean-Marie Guyau a partir del griego antiguo ἀνομία (anomía) "ausencia o quebranto de las leyes", y este de ἀνομος (ánomos), "fuera de la ley", del prefijo privativo ἀ- (a-) y νόμος (nómos), "ley", a su vez de νέμω (némo), "dispensar, distribuir", del protoindoeuropeo *neme-
↑Desde 1999 se recomienda considerar siempre diptongo, a efectos de acentuación gráfica, la combinación entre vocales cerradas “átonas” (/iu/, /ui/), o entre vocales cerradas con vocales abiertas ambas “átonas” (/ua/, /ei/, /io/, etc.). Esta recomendación se transforma en prescripción a partir de la reforma ortográfica de 2010, por lo que muchas palabras que se podían escribir con hiato deberán escribirse en diptongo. No obstante, esto no implica una proscripción en la pronunciación. Más información.