Pero oye, hijo: para que veas si soy tolerante; para que veas cómo sé dar al cariño leal y honesto alguna franquicia de buena ley, te permito... voy más allá... te mando que des a Fernanda un besito en la frenteBenito Pérez Galdós. España trágica. Capítulo Capítulo IV.