Vasito de porcelana, cristal, etc., de formas tan múltiples como caprichosas, destinado a colocar las plumas para que no se oxiden ni estropeen.2
Ejemplo:
Veintiocho años con el mismo posaplumas de losa con tres manchas de tinta, dos más chicas y la tercera en forma de estrella, delante de las naricesLeónidas Barletas. La felicidad gris. Página 28. Editorial: Editorial Corinto. 1945.
↑Se han detectado posibles prefijos semánticos en la palabra. De ser así, es posible que haya varias divisiones válidas como ocurre en el caso de transatlántico (tran-sat-lán-ti-co o trans-at-lán-ti-co, incluso tran-sa-tlán-ti-co) o subrayar (su-bra-yar o sub-ra-yar) [1]. Por motivos técnicos, en estas situaciones sólo se mostrará la división fonética y no la división léxica o semántica, aunque se recomienda preferir esta última para el lenguaje escrito. Más información.