"ya pues Irma, suelta a tu pololo no seai sinvergüenza no ves que se prendió la luz". Donoso, José (1990 [1970]) El obsceno pájaro de la noche. Caracas: Ayacucho, ¶1
"Alegre, elegante, amiga de la tertulia nadie como ella para sacar de sus casillas a los pololos!... Creame, amigo, que un cosquilloso calorcito de vanidad me subia por la sangre al rostro cada vez que salia a la calle junto a ella. Se volvian para mirarnos." Santiván, Fernando (1909) “El amor al campo”. En: Palpitaciones de vida. Santiago de Chile: Universitaria, p. 197 [2]
(Astylus trifasciatus) Coleópteropolífago de la familia Melyridae, endémico de Chile central. Es fitófago y actúa como polinizador. De 1,5 cm de longitud en promedio, posee una coloración anaranjada con manchas negras. El resto del cuerpo es de color negro. Produce un zumbido al volar similar al tábano o coliguacho. [cita requerida]
"Nos hemos acostumbrado a ver en el coleóptero o ‘pololo’ al insecto por excelencia." Benjamín Subercaseaux (1954) Santa materia: ensayos y lecciones de visión y tacto. Santiago de Chile: Zig-Zag, p. 189 [3]
"Dentro de estos insectos destacan por su importancia las larvas de coleópteros y entre ellas, en las provincias de Malleco y Cautín, las más comunes son: el pololo verde grande (Brachysternus prasinus Guér.), el San Juan o pololo verde (Hylamorpha elegans Burm.) y el pololo café (Phytoloema hermanii Germ.)". Ramsay, Jorge; Frías, Hernán & Beltrán, Luis R. (1975 [1960]) Extensión Agrícola Dinámica Del Desarrollo Rural. San José: Instituto Interamericano de Ciencias Agrícolas, p. 523 [4]
"Una última encuesta en el Cuarto Sector de la población mostró que sólo el 45 por ciento tiene un trabajo fijo; el 21 por ciento vive de ‘pololos’ más o menos frecuentes". Pobladores. Revista Hoy, 4 de diciembre de 1979
"Díaz alterna el acarreo de palos con pololitos en la construcción". [5]. Diario El Mercurio, 27 de septiembre de 2004
"En su oficio es un artista… por lo caro que cobra. Ahora, con la crisis se ha desbandado toda su clientela. Con los escasos “pololitos” que le caen de cuando en cuando, no alcanza a comer. Ya hubiera muerto de hambre si no fuera por la ayuda que le prestan los padres del convento." (Belmar, DanielRoble huacho Editado por Cultura, Santiago de Chile. Año 1847. Página 71 )
"La prenda más típica de aquel uniforme embarazoso que aprendieron a confeccionar todas las madres y costureras modestas de postguerra eran unos calzones oscuros de corte moruno que se ajustaban por encima de la rodilla y se conocían con el nombre de pololos. El pololo es un invento de la Sección Femenina. Ni siquiera la palabra viene en el diccionario. El pololo es prenda ambigua, ya que parece que permite moverse con libertad, pero, al no ser de tela elástica y pegadiza a la piel, resulta que tira y estorba, además de lastimar con sus gomas la cintura y los muslos de la usuaria." Martín Gaite, Carmen (1994 [1987]) Usos amorosos de la posguerra española. Barceona: Anagrama, p. 61
"En la pausa de recuento de puntos hubo un desfile sobre la historia del bañador, desde el pololo al tanga y donde nadie se acordó de Cocó Chanel." Gente. El País, 20 de junio de 2003
↑San Martín Núñez, Abelardo (2009) “Influencia de lenguas indígenas en el registro festivo del diario chileno La Cuarta”. En: Boletín de Filología, 44(2):149 [1]